lunes, septiembre 04, 2006

He vuelto..., ¿pero me voy?


Me ha costado volver, y no me refiero a las vacaciones, sino volver a este rincón público que, sin querer o queriendo, ha cambiado en algo a lo largo de estos meses, aún sin haberse movido o añadido ninguna palabra por mi parte desde el pasado 16 de julio. Sin embargo, por vuestra parte sí que se han ido sumando comentarios durante este tiempo, los cuales agradezco infinitamente, en serio.

Este verano he escrito poco. Me he dado cuenta de que escribir con folio y boli es muy cansino y me da mucha pereza hacerlo. Como mucho he tomado anotaciones, sin embargo fue coger el portátil de mi hermano a finales de Agosto y empezar a brotar alguna de las cosas que me han ido pasando y que, supongo, iré colgando puesto que ya están escritas.

He pensando mucho sobre si cerrar el chiringuito o dejarlo abierto. No me apetece explicar el por qué, pero tiene que ver con la libertad de escribir lo que a uno le de la gana sin herir a nadie (me refiero, lógicamente, a ese alguien que lo es todo). Si algo tengo claro es que prefiero autocensurarme antes que hacer daño públicamente con las palabras, y creo que censura y libertad se declararon la guerra hace mucho tiempo. No me gusta esa sensación, no me gusta no poder contarlo todo, lo bueno y lo malo. Ah!, también existe otro pequeño detalle estúpido que me hizo dudar sobre si seguir o no, pero lo voy a obviar de mi mente y de mi vida. No merece ni una triste palabra.

Y no, no escribo todo esto para que me digáis que no deje el blog, que siga escribiendo, etc., simplemente es que me encuentro raro con este retorno y, en teoría, tu propio blog debe ser confortable, porque para eso lo decoras con las palabras que tú quieres y lo pintas del color que te apetece…, y no sé si en un futuro próximo lograré reclinarme confortablemente en mi tapicería manchada de vómitos propios y ajenos…

Pues eso, que gracias por estar ahí, que sigo mareado y que iré colgando post de sensaciones veraniegas y alguna que otra foto que los aderece… Lo que pase mañana ni yo mismo lo sé.

31 comentarios:

hack de man dijo...

Anda, mira, llego por casualidad a ver si habías vuelto y... soy el primero en comentar!!

Bueno, pues espero q hayas disfrutado a tope y respecto a lo del blog, supongo que más de uno te dirá que hagas lo que te pida el cuerpo. Y es lo que te digo yo: haz lo que te salga del forro, hablando mal y pronto, sorry.

Respecto a lo que comentas de no sentirte cómodo escribiendo según qué cosas que puedan dañar a otros... yo también la he tenido esa sensación... y no mola, tienes razón.

De todas formas, me gusta que hayas vuelto y espero seguir disfrutando de tu blog, autocensurándote o no... ;-)

Abrazos!

Alumnedelmon dijo...

Lo que más me turba de este post son los tres agujeros de la foto.

Dicho esto, tú no te vas. No es una petición, ni un imperativo. Es una constatación de algo que tú no sabes, pero nosotros sí: eres indispensable en nuestra ruta bloggera, así que si algún día se te pasara por la cabeza eliminar el blog, te lo advierto: Murcia se llenará de bloggers asesinos dispuestos a atarte a las verjas de la plaza y a...

Por cierto, bienvenido. Ya era hora.

Jose Antonio Vallejo Serrano dijo...

Ya sabes que iba a doler si te fueras, pero mi incapacidad para decir cosas azucaradas limita mi manera de expresar cómo me sentiria. Si es por tu novio es mejor que sigas tu escala de valores y hagas lo que creas conveniente, eso si, yo si soy suficientemente obsesivo como para presentarme en Murcia y sacarte los ojos.

Cobre dijo...

Esto es sencillo; todos escribimos pq nos apetece, cuando queremos y lo q nos sale de las narices. Si no es así, si no te encuentras agusto, si no tienes total libertad y te limita a la hora de escribir... haz lo q creas mejor niño.

Hay algo q me ha parecido curioso. Dices q parte de la motivación para cerrar tu chiringuito es q no quieres hacer daño con tus palabras a ese alguien tuyo; pero si no lo escribes, ni lo dices.. los silencios también hacen daño...
Perdónperdónperdón por meterme dnd no me llaman, me tiran los berenjelanales!.

Si decides quedarte.. genial, eres una maravilla escribiendo y, como te han dicho, indispensable en una buena ruta bloguera; si decides irte será pq es lo mejor, pero en ese caso te echaré un montón de menos jodío!. (Y si hay excursión a murcia para sacarte los ojos me apunto eh!)

Un besazo guapo!

Alumnedelmon dijo...

Vale, ya somos tres. Y seremos muchos más, ya verás...

Juan Muriel dijo...

yo solo te dire que me encanta que hayas vuelto, que en este verano he ido viniendo a veces para ver si habias retornado, que este es mi blog de cabecera y que necesito seguir leyendote... no hace falta que te autocensures, las cosas que creas que pueden hancer daño escribelas y mantenlas en privado y el resto nos lo haces saber a todos. yo hace ya un par de meses que decidi no hablar de mi relacion en el blog porque no me apetece hacer de ella un espacio abierto donde cualquiera pueda entrar.

te he echado de menos, marica cursi.

Anónimo dijo...

Durante mucha parte de tu vida, has necesitado escribir sin compartir.

Tu experiencia personal te hizo odiar el concepto de blog. Sin embargo, después de algún tiempo, comprendiste las posibilidades que tenías aquí.
Y te diste cuenta que el mundo de los blogs es como las calles que llevan a Roma. Así que un día, por previsión, me lo notificaste: "tengo un blog".

Lo que tal vez no sepas, es que esa revelación fue la que acabó por convencerme de cerrar mi chiringuito y de exiliarme, como ya me había planteado hacer.
Tenías derecho a tener tu propia experiencia, sin interferencias.
A mí me enriqueció mucho. A ti también te lo iba a hacer.

No seamos fariseos ni idealistas. Nadie es del todo libre al escribir, cuando está emocionalmente implicado con alguien. Son esas ataduras las que nos vuelven más cautelosos -más aún-, más contenidos.
No puedo negar que cada vez que he entrado en tu blog, como ahora, me he puesto irracionalmente a temblar, aún sin leer nada, sencillamente zarandeado por el lazo emocional que me une a ti.

Pero con todo eso, pregúntate:
¿Por qué no puedes contar lo malo? ¿Por qué le tienes tanto miedo a hacerle daño a las personas?
Todos hacemos daño a los demás. Y a veces lo hacemos sin siquiera usar palabras. Incluso, precisamente, por no usarlas.

Sabes que prefiero las palabras, para tener al menos, una base sobre la que partir, para poder comprender sin tener que inventar.
Para tener la sensación de que nuestra relación rezuma confianza, para saber si es verdad que me consideras alguien receptivo, comprensivo o empático, o son sólo palabras emitidas...
Para no convertirnos en dos desconocidos conformistas, amén de irredentos, que seguirán pecando siempre de lo mismo porque: "bah, a santo de qué decírselo?" "Corramos tupidos velos y sigamos en la inopia, y tengamos así por lo menos el día en paz".
Así uno no aprende.
Y sabes que hemos aprendido muchas cosas juntos. Y que muchas veces nos han dolido.

Como si no se notara cuando algo va mal, cuando algo nos ha molestado. Somos personas expresivas. Eres expresivo. Yo soy expresivo por ejemplo, cuando me indigno (y te encanta).

Sé, que vas a tener sentimientos encontrados al leer este comentario. Uno que se planteará darle al botón eliminar, y otro que pensará "¿cuánto de lo que me dice tengo que considerar?"

Y sé, por otra parte, conociendo tu gran autonomía -que admiro- que nada de lo que diga afectará a tu opinión.
Tomarás la decisión que quieras tomar.

Pero, por lo menos, que seas consciente de que lo harás por ti.
No por mí.

Por un lado, es importante sentirse confortable con su propio espacio. Por otro, es delicado hablar de ciertos temas cuando te leen. Puede ser enriquecedor, catártico. O puede que no.

Pero, "Arcadas",... tú y yo sabemos que estás tremendamente encariñado al blog -y a sus gentes- que si lo dejaras, lo extrañarías mucho.
Que te gusta lo que tienes aquí.
Y escribir para ellos.
Si eso te hace feliz, no renuncies a ello. Tienes derecho a conservarlo.

La libertad no es tan difícil de conseguir, o por lo menos, acercarnos al máximo a ella. Hay que atreverse a saltar, a arriesgar... A ser nosotros mismos. Íntegros.
Te invito a serlo, como siempre. Yo nunca intentaré cortarte las alas.
Porque yo también las empleo.

Un beso

Pow dijo...

He de decir que no he leído los comentarios, pero lo que sí que tengo claro es que uno ha de escucharse ante todo a sí mismo. Y para eso, en ocasiones, hay que aprender a gritar. Porque el ruido del entorno termina en ocasiones por ahogar nuestras propias palabras.

Macacolandia dijo...

Que bien que volviste de vacaciones.
Que mal que te plantees el cierre del blog.
Un saludo y hagas lo que hagas que sea lo que de verdad quieres hacer.

Sansara dijo...

Me voy a meter donde no me llaman.
Comprendo a la perfección el punto del autor porque he estado ahí, y sé qué implica.

Saltándonos cronologías uno llega al final, en este tipo de casos, a contar con mucha gente conocida que les lee, y esas historias que -en este tipo de blogs- uno cuenta acaban siendo como hablar del vecino de al lado, incluso a sabiendas de que te puede o va a escuchar.

Y aunque nos diga mil y una veces (aquí contesto a tu novio) que no molesta... no es que le moleste a él o no. Es que ya no es el chorro de inspiración y el texto de golpe. Automáticamente viene a la cabeza el "aquí hablo de x, y le va a sentar mal" y acaba uno o por no hablar de x, o por no decir lo que quiere decir, o por no escribir el texto...

O, simplemente, viendo que el chorro de palabras que salía antes sin freno, ahora tiene barreras -salvables o no, pero barreras- que no nos pone nadie, si no... nosotros mismos al escribir.

Somos nosotros, los autores, los que nos encontramos con esa situación de privación de libertad. No por lo que hacéis los que leeis (leemos, en este caso) si no por... nosotros mismos. Por dentro.

Así que supongo que te entiendo. Y aunque yo mismo le he dado muchas vueltas al asunto (empezar en otro formato, en otro espacio, en otro lado?) al final todo volvería a ser lo mismo. Unos meses, y luego los conocidos adictos al asunto.

Yo opté por seguir adelante. Y al final me he acostumbrado un poco. Todas las rocas se acaban puliendo...

Vamos, en caso de que te sirva como referencia la opinión.

Abrazos,
Sns.

S.B.S. dijo...

Somos libres para hacer lo que debamos hacer. Quizá esto no forme parte demasiado de la realidad. Esa sensación la he tenido en ocasiones. Por eso hagas lo que hagas, estará bien hecho. Tanto si lo cierras como si sigues.

Elena -sin h- dijo...

La verdad es que no queda mucho que decir, especialmente despues de lo escrito por tu novio y Sansara... muestran en cierto modo los dos puntos de vista, aunque por mi posición me encuentro más cerca de Sansara. A veces es muy complicado, cambias frases, las ocultas lo mejor que puedes porque están ahi y sabes que no van a gustar pero porque no las escribas no van a dejar de estar ahí.

Creo que todos nos hemos enfrentado a este dilema, yo misma también estuve a punto de cerrar aunque lo terminé cambiando por unas vacaciones, pero creo que al final estos rincones nos dan más cosas buenas de las que nos quitan.

Un abrazo grande, grande :)

siouxie dijo...

Yo sólo quiero decirte algo que ya sabes: Me gustas. Y me ha entrado mucho gustirrínín por el body cuando he leido tu comentario en mi blog hace un momentillo y he comprobado que !HAS VUELTO!.

Un abrazo de osa.

Eva Luna dijo...

Después del comentario de tu novio poco queda que decir la verdad... pero mira, cada blog es de su dueño y este escribe lo que quiera: no tienes porque escribir todo, ni cierto ni falso, puedes ser tu mismo o tu personaje, puedes contar lo banal o lo profundo,...
Pero es normal que haya ciertas cosas que si sabes que alguien a quien puedes dañar las va a leer, no las escribas. Yo por eso tengo mi blog al margen de mi pareja, familia y amigos de antes-de-internet, para ser libre de escribir y que la gente que me vaya conociendo no me juzgue, si quieren que lean y sino, que no...

Sobre todo: BIENVENIDO AMOREEEE

Anónimo dijo...

El blog es tuyo, así que úsalo como y cuando te resulte más comodo.

Mar dijo...

estoy muy contenta de volverte a leer, y todo lo que dices lo hemos vivido o estamos viviéndolo todos. ¿Qué hice yo para solucionar una parte de eso? hacerme otro blog del que no sabe nadie nada :)

Hagas lo que hagas estará bien, bienvenidooooo

El Bosco dijo...

Arcaditas, qué gusto verte, olerte, saborearte otra vez, ah, los vómitos, cómo atraen.
Mira no te diré que te quedes, que eres una ventanita que me gusta entreabrir, que algunos ratos me ayudas a combatir ese silencio terrorífico que, aveces, me hace vomitar.
Pero si te quedas, qué bien tener unos piececitos como los tuyos para echarles la bofa encima.
Un beso grande.

nosue dijo...

Jeje, vaya locura, somos muchos los que te entendemos... la vida, la ilusión, las ganas, los proyectos... casi todo... es susceptible de aparecer y desaparecer... personalmente, disfruto mucho con tu blog... te agradezco que estés por aquí... siempre que el cuerpo te pida seguir estando...
Un beso

Por cierto... me encanta no saber que va a ocurrir mañana... es parte de la gracia de esta tragicomedia que me hace seguir expectante....
salud ¡¡

Dammy dijo...

Yo tan sólo te puedo decir que disfrutes de tu blog, no te sientas prisionero de él, supongo que siempre hay cosas que pueden afectar o hacer daño a alguien que no quieres hacer, tal vez esas palabras merezcan un "aparte" o ser escritas a modo de borrador, pero tal vez sea peor el dejar de escribir, creo que lo necesitas o por lo menos creo que te gusta hacerlo y por eso mismo no deberías dejarlo. ;-)

Un blogabrazo.

Bowie dijo...

joder tío qué alegría que has vuelto y que has actualizado el blog

creo que llega un punto, a mí también me ha pasado, en el que demasiada gente que te conoce en la vida real lee el blog...y no vas a escribir sobre ellas, verdad?

yo lo soluciono inventando un lenguaje críptico y camuflado que al final quizá solo entiendo yo, jaja

otra solución es conocer a gente nueva y ni mencionarles la palabra blogger

no lo dejes, pordios, eres una de mis lecturas insustituibles

venga, en serio

va el abrazo

Ysbrand dijo...

Uy! Te comento con mucho retraso (mental)

Me sumo a los que no quieren que te vayas, y mira que detesto sumarme a las masas. Me obligas a hacer algo supervulgar y te odio por ello.

hack de man dijo...

Me sumo a la expedición a Murcia.

bernardopajares dijo...

...no dejes esto ahora que te acabo de descubrir, hombre, por diooooo...! Ánimo y adelante, que seguro que eres increíble, y tú lo sabrás mejor que nadie :)

Darkblue7 dijo...

Para tener esa libertad yo lo que he hecho es darle la dirección a muy poquitas personas. Y enter esas personas no se encontraba "ella", ya que sabía que yo iba a escribir mucho sobre ella, y no me apetecía que leyeso todo. Este era (y es) mi pequeño rinconcito privado.
Un abrazo

(y aunque digas que no lo haces por eso... NO DEJES EL BLOG)

almayer dijo...

las sandalias me gustan, sí

besos

Cobre dijo...

Mira mira q de gente dispuesta a ir a murcia!!; lo de sacarte los ojos ya es secundario...

El Bosco dijo...

y los tres agujeros ¿qué?. Me sumo a Z, qué intriga. Espero que no te hayas ido todavía: retenerte un minuto, a veces, puedo ser toda una vida, depende de la longitud. A mi tampoco me encanta la canción pero si me gusta y me recuerda, ya sabes , las asociaciones mentales.
Eh, di algo, postea.
y te beso, claro.

Lechuza dijo...

Perdona. Sé que no lo haces para que te digamos que sigas, pero de todos modos te voy a llevar la contraria. Sigue!!! Hace poco visité tu blog por primera vez, pero me gusta mucho.
Entiendo a lo que te refieres con respecto a la libertad de escribir, no sentirte condicionado por nada ni por nadie. Yo también tuve pensamientos sobre ello con mi propio blog. No me gustaba perder anonimato, pero al fin decidí que no lo dejaría. Me hace sentir bien, y también a laspersonas que me leen y a las cuáles les gusta.
Nunca vi un blog con tantos comentarios como el tuyo. Hazlo por todos

Anónimo dijo...

.

No he leído todos los comentarios de ahí arriba y no sé si voy a repetir algo que se haya dicho.

Y es que estoy tranquilo porque algo me dice que no nos vas a dejar así de fácil.

Por otra parte, a ver si te creías que te íbamos a dejar escapar como si nada.

Un beso.

alZhu dijo...

Todos hemos pasado por eso y todos acabaremos dejándolo antes o después. Sólo es cuestión de encontrar el momento: exactamente cuando las ganas se vayan.

Un abrazo.

claradriel dijo...

GUAPO!!
Echaría de menos tus palabras, pero, a decir verdad, también echo de menos las mías, y, sin embargo, aunque las sensaciones se agolpan, no conjuran el impulso de materializarlas en expresión. Vivo, pero callo.
A veces ocurre.

=)
=)